El reciente informe del Instituto Nacional de Estadística (INE), que elevó el crecimiento del PIB de España en el segundo trimestre de 2025, ha solidificado una narrativa que se venía gestando: España se ha convertido en la «locomotora económica» de la Unión Europea, superando notablemente las tasas de crecimiento de las grandes economías tradicionales como Alemania y Francia.
Este giro de roles no es casual. Mientras el motor industrial del continente lidia con la inflación energética y la desaceleración global, la economía española ha encontrado impulso en una serie de factores resilientes y estratégicos. Pero,… ¿es oro todo lo que reluce?
Los Motores del Liderazgo Español
El crecimiento del PIB español, que se mantiene con fuerza según datos oficiales, se sustenta en cimientos que han demostrado ser menos vulnerables a las presiones externas que afectan al núcleo de la Eurozona.
1. El Resurgir del Turismo y el Consumo Interno
España se ha beneficiado enormemente de la completa recuperación del turismo. El sector no solo ha alcanzado niveles pre pandemia, sino que en muchas áreas los ha superado, inyectando liquidez masiva en la economía. Este impulso, sumado a un aumento en el consumo de los hogares, ha generado un fuerte efecto dominó en los sectores de servicios, que son la columna vertebral del PIB español.
2. El Impacto de los Fondos Next Generation EU
España es uno de los principales beneficiarios de los fondos europeos Next Generation EU. El gobierno ha canalizado esta financiación hacia la modernización de infraestructuras y la transformación productiva. Esta inversión pública ha actuado como un poderoso estímulo fiscal, generando actividad económica que no depende de la demanda externa.
3. La Ventaja de la Energía Renovable
A diferencia de Alemania, cuya dependencia del gas ruso y su gran sector industrial la hicieron muy vulnerable a la crisis energética, España ha visto un impulso gracias a su ya avanzada infraestructura de energía renovable, aunque todavía nos queda mucho camino por recorrer y los problemas no son ajenos a este sector.
4. Resiliencia Demográfica
Según análisis como el de Financial Times, la inmigración ha sido una fuente crucial de resiliencia económica. La llegada de población activa ha sostenido la Seguridad Social y ha mitigado la escasez de mano de obra en ciertos sectores, lo que es un factor que otras grandes economías europeas (con tasas de natalidad bajas) no pueden replicar.
El Contraste con Alemania y Francia
Mientras que España crece según los datos , Alemania, la principal potencia económica de la UE, ha enfrentado dificultades. Su modelo, altamente dependiente de las exportaciones industriales y el gas barato, se ha visto penalizado por:
- La subida de los precios energéticos.
- La debilidad de la demanda global, especialmente la china.
- Los desafíos estructurales en su industria automovilística.
Francia, por su parte, también ha mostrado tasas de crecimiento más moderadas, enfrentando igualmente la desaceleración industrial.
El Reto de Convertir Liderazgo en Estabilidad Duradera
Si bien los titulares son favorables, el desafío para España ahora es convertir este crecimiento cíclico en prosperidad duradera. Para ello, es crucial abordar retos pendientes:
- Reducir la Deuda Pública: A pesar de la mejora de la calificación crediticia, el volumen de deuda pública se mantiene en máximos históricos.
- Productividad: Mejorar la productividad a largo plazo del capital y el trabajo.
- Vivienda: Abordar el problema de acceso a la vivienda, que sigue siendo una barrera para la estabilidad de la población joven.
En conclusión, la confirmación de España como líder de crecimiento en la Eurozona es un arma de doble filo, ya que, como argumentan algunos medios, no parece trasladarse estos datos a las familias españolas. El nivel de deuda, inflación y presión fiscal chocan con las perspectivas macro más positivas…


